En 2023, las empresas PwC y Carsa realizaron un estudio encargado por la Comisión Europea sobre iniciativas formativas que mejoraran las competencias, dado que es una de las prioridades de la agenda comunitaria. El objetivo era conocer el funcionamiento de las acciones políticas de recualificación y mejora de competencias, identificar las mejores para extraer lecciones y proponer recomendaciones.
Las iniciativas que se analizaron estaban orientadas, en general, a la población activa y entre ellas estaba la española ‘Digitalízate’, operativa desde finales de 2019. En total, se analizaron 47 iniciativas seleccionadas de 39 países, incluyendo 28 europeos, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, India, Singapur o Sudáfrica, entre otros.
Según los resultados del estudio, conocido por Servimedia, la iniciativa ‘Digitalízate’ de España aparecía en el ‘top 5’ de cuatro de los cinco ejercicios comparativos realizados sobre desempeño, obteniendo la segunda mejor puntuación en cada uno de ellos, por detrás de la iniciativa irlandesa ‘Skillnet Ireland’, que ocupó el primer puesto en esos cuatro ejercicios. En estos se ha medido el número de personas formadas y su integración en el mercado laboral, el nivel de dominio de habilidades específicas que preveía la iniciativa, la capacidad para encontrar empleo a través del programa, las posibilidades para retener empleados y encontrar nuevos perfiles para las empresas involucradas, la contribución al desarrollo de una cultura del aprendizaje y a la digitalización de la economía, entre otros elementos analizados.
Entre las recomendaciones del informe destacan que los políticos actualicen sus competencias continuamente, estimulen la participación de sector privado en iniciativas de recualificación, den incentivos económicos a las empresas participantes, regulaciones flexibles para que las compañías adapten sus programas de formación a las necesidades cambiantes y simplificar el proceso de acreditación formativa.
El informe ofrece un resumen por país y en el caso de España destaca que combina la formación presencial con la formación práctica en el puesto de trabajo, pone énfasis en dotar a las personas de habilidades digitales, ofrece oportunidades para estudiar y trabajar en el extranjero y fomenta la creación de ‘startups’ innovadoras.
