“En este mundo de alta velocidad en el que vivimos, rodeados de pantallas, teléfonos móviles y a las puertas de la era de la “inteligencia artificial”, las grandes obras de arte se hacen más necesarias que nunca”.
El Dr. Álvaro Fernández García es Doctor en Medicina y Cirugía “Cum Laude” por la Universidad de Murcia, España. Especialista en Cirugía Plástica Estética y Reparadora y Profesor de Anatomía Humana en la Facultad de Medicina de las Universidades Francisco de Vitoria y Alfonso X El Sabio, y actualmente el ÚNICO ARTISTA EN EL MUNDO que realiza manuscritos iluminados con pigmentos históricos creados a mano.
“Fue hace más de veinticinco años cuando mi interés comenzó, así como mis numerosos estudios y publicaciones sobre las técnicas pictóricas de los miniaturistas de libros y pintores sobre tabla europeos de la Edad Media y el Renacimiento”.
Fue cuando realmente se sumergió en el profundo análisis de los recetarios medievales, de las publicaciones de investigadores de todo el mundo y el examen directo al microscopio de numerosas miniaturas de época, como fuentes necesarias para el desarrollo de su técnica pictórica, iniciada desde la admiración y el asombro vertiginoso de un niño ante la belleza.
“Para celebrar el centenario del descubrimiento, mis maestros y profesores habían organizado una visita de todo el aula, en un desesperado intento de aplacar nuestra ignorancia y despertar nuestro interés por el arte y la cultura al Palacio Episcopal de Toledo, donde se celebraba la exposición “Reyes y Mecenas”. Acudí con la indolencia propia de mi corta edad. Recorrí salas y galerías, hasta que me detuve en una vitrina. Aquella urna de cristal contenía un objeto que me cautivó durante un largo rato. Era un libro de horas decorado con oro y pigmentos bellísimos resplandeciendo a la luz del expositor”.
Una obra maestra clave en su evolución artística como Maestro iluminador de manuscritos es el Apocalipsis Matritensis. Para la realización de éste códice han sido necesarios dos años de dibujos preparatorios y pruebas técnicas y otros tres para su estricta ejecución (2010 al 2015).
No es una copia, no hay ninguno igual, es un original fruto del estudio de los trabajos de antaño y la experiencia y evolución del artista, tal cual hacían los grandes iluminadores del Medievo.
Por lo tanto, se puede afirmar sin ningún género de duda que se trata de una pieza única de gran relevancia histórica y de una deslumbrante belleza artística.
La obra es un Tesoro, de una ejecución muy ambiciosa. Todas las páginas están iluminadas como corresponde a un códice de gran lujo. Sus páginas de pergamino aparecen repletas de decoraciones marginales, infinidad de orlas vegetales, grotescos o drolerías, roleos o rinceaux y numerosas iluminaciones a página entera de gran hermosura y expresividad. El uso de oro de ley bruñido en todas las páginas habla de una creación exclusiva y muy elegante.
Esta obra maestra de la iluminación de manuscritos ha sido editada como facsímil por CBF, editorial de gran prestigio y larga trayectoria en textos apocalípticos hispanos.
“Como editores, nos sentimos muy satisfechos y orgullosos de aportar a la historia del Arte nuestro granito de arena con tan magna obra. Es para nosotros un verdadero honor poner al alcance de nuestros lectores una creación de tal envergadura”.
Una creación que supone un viaje inolvidable de los sentidos, porque en palabras del autor “Las obras maestras intervienen en nuestra vida psíquica de forma que nos ayudan a construir nuestra identidad individual y colectiva. Lo que para el hombre del medievo era un objeto de lujo y demostración de poder, se convierte para el espectador actual en un aislado oasis de belleza, meditación y vuelta a los orígenes ancestrales. El ser humano actual se conmueve, encuentra consuelo y sublimación en las grandes obras maestras”.
Y si duda alguna, esta lo es.
