Europa, tan rica cultural e históricamente, tan diversa en su territorio es un proyecto en construcción que está constantemente buscando la integración adecuada (dentro de su complejidad), sin embargo hay una cuestión que resulta algo desapercibida: la eurofobia.
Europa, en su conjunto, debe reaccionar, entender la urgencia de fortalecer los lazos con el mundo árabe y especialmente debe destacar las buenas prácticas a través de la comunicación.
No se está gestionando adecuadamente la imagen de España en el mundo árabe. A pesar de los grandes esfuerzos y planes de cooperación que España lleva a cabo en la región desde hace décadas, estos esfuerzos pasan desapercibidos especialmente para nuestros vecinos marroquíes.
Es crucial lanzar preguntas abiertas y comenzar una discusión más amplia sobre la eurofobia.
¿Es Europa consciente de la necesidad de promover la cooperación con sus países vecinos además de sus valores europeos? ¿Cómo puede Europa trabajar en su imagen en el ámbito global y destacar los esfuerzos de naciones como España en la colaboración con el mundo árabe?
La eurofobia afecta a la percepción de la Unión Europea, entorpece el progreso y la colaboración en un mundo interconectado.
Europa debe reflexionar sobre esta cuestión y tomar medidas efectivas que promuevan la cooperación y el entendimiento mutuo para no extender la desconfianza y la aversión.
