La mirada de Ulisas

Inquieta por tantos temas y realidades

LA MIRADA DE ULISAS con inmensa curiosidad intelectual se traslada al Hay Festival, evento de gran relevancia en la costa Atlántica de Colombia, en esa Cartagena de Indias, que atrae cada año a millones de turistas. ¡Y con justa causa! Es una o la más bella ciudad colonial del mundo. Se mantiene bien cuidada y conservada. Lugar obligado para todo ser que bucea imágenes y precisa vivir emociones intensas de variado colorido. Pero esta vez, mis ojos no se van a detener en Cartagena como tal, lo hará en un próximo artículo porque la capital del departamento de Bolívar vale la pena ser descrita con minucia y buen tino.

Ahora me ocupa el Hay Festival, evento literario de alta notoriedad por reunir en su seno y en sus fantásticos escenarios a grandes autores a nivel internacional, nacional y local, siendo un evento como muchos de los que registra Cartagena, por ser destacados y experimentados a plenitud. El Hay Festival nace en un pequeño pueblo galés Hay-on-Wye en 1988, en aquel entonces de unos 1800 habitantes donde ostentaba numerosas librerías. De ahí deriva su nombre: “El Hay Festival”. Ya prodigiosamente reconocido y aclamado mundialmente. Un evento que se inicia gracias al brío de un grupo de amigos, que jamás sospechó la trascendencia que cobraría aquel incipiente sueño literario. Hoy convertido en realidad cobra gran difusión universal. El Hay Festival ya echó sólidas raíces por diversos espacios. Se describe como “una organización sin ánimo de lucro, creada hace 37 años en el Reino Unido y con la presencia en varios países, que crea festivales inclusivos y para todos los públicos en los que celebramos la literatura, el pensamiento, las ideas y el intercambio entre las personas. Nuestro principal objetivo es hacer la cultura accesible para toda la ciudadanía, independientemente de su origen y edad”. El Hay Festival, ya bien institucionalizado, organiza festivales en diferentes ciudades del mundo donde convocan e invitan a prestigiosos personajes dentro del ámbito literario. Desarrollan programas de alto nivel donde incluyen presentaciones de escritores, de libros, promueven charlas, debates, talleres, recitales de poesía, conciertos, proyecciones de videos y conferencias para hacer del lugar escogido el festín de la palabra. Además de trasladar esas voces a barrios populares. La directora internacional, Cristina Fuentes La Roche, sostiene que el Hay Festival preconiza el pensamiento crítico y la diversidad de voces. Propicia  intercambio, nuevos encuentros, y que las grandes conversaciones sean también entre el sur global  y el sur /norte , sobre temas que solo se puede abordar de una forma colectiva como las igualdades, la democracia o los retos del cambio climático. Espacio que debe generar esperanza y celebrar el placer humano del intercambio. Su propuesta tuvo gran acogida en Cartagena de Indias donde cada año desde el 2015 se celebra con bombos y platillos el Hay Festival (inclusive en español se juega con la palabra “Hay” como si respaldara su verdadera existencia). Se inauguró el 25 de enero y mantiene una duración de cuatro días hasta su clausura final el 28 del primer mes del año. Disfruta de gran trascendencia dentro de los acontecimientos nacionales de alto turmequé y se instala en los corazones de su gente y de los huéspedes que asisten cada año. Muchos asistentes son asiduos por lo que representa un Festival de tanta categoría. Cita obligada de la totalidad del gremio literario, sus seguidores y la prensa tanto nacional como internacional. 

En esta oportunidad, mi mirada se va a posar en la presencia de una gran delegación que Basilio Rodríguez Cañada invitó para mostrar el talento de sus autores dentro del marco del Hay Festival. Ya había asistido a la ciudad de Cartagena para cumplir con múltiples manifestaciones literarias, pero este año es la primicia dentro del marco del Hay Festival. Lamentablemente, no todos sus ilustres autores lograron sus presencias, pero la representación que asiste saca la “cabeza” y la cara por los que no tuvieron la suerte de formar parte de la delegación. Hago la salvedad de que Basilio, excelente editor además de autor de varios libros de amplia resonancia, eminente ser humano de palpable generosidad extiende la invitación a toda su familia literaria Sial Pigmalión. Casa Editorial que cuenta con numerosos y excelentes literatos de diferentes orillas y del mundo. África está muy bien representada igual que países como Túnez, Egipto e Israel, por sólo mencionar algunos, ya que su nómina se extiende por diferentes países tanto de Suramérica como de Norteamérica y demás continentes. Como editor se abre camino por diversos escenarios literarios, bien emplazado en las más importantes ferias del libro del planeta como Frankfurt, Guadalajara, Madrid, Bogotá etc… No le tiembla el pulso para mostrarse como el excelente editor y escritor que es. En esta oportunidad, en Cartagena lo acompañan los anfitriones Gustavo Tatis, Lidia Corcione Crescini, Carlos Vásquez Zawadzki, y otros autores de prestigio como Nery Santos de Venezuela, Luisa Ballesteros – Francia, Colombia, María del Pilar Cavero- España, Laura Hernández de México, Cecilia Castro Lee de USA y Colombia, José María Paz Gago, Roberto Gil de Mares -Colombia, Fabio Martínez- Colombia, Winston Morales Chavarro- Cartagena, Hernán Toro y varios poetas y escritores del Caribe y del Pacífico colombiano, así como otras brillantes mentes y profesionales de las letras que saben plasmar sus escritos con belleza y sabor.  La lista es larga e importante. Una delegación acreditada que no sólo se presenta en el marco del Festival en el teatro Heredia, emblemático en la ciudad, sino en otros escenarios de prestigio. Hacen su aparición en el Museo Histórico de la ciudad de Cartagena, en la Librería del Fondo Remedios la Bella, en el café bar restaurante Santa María del Mar, en la Casa Bolívar, en la Alianza Francesa de Cartagena y en colegios que cada año esperan ansiosamente la aparición de los escritores para deleitarse con sus presentaciones. Los estudiantes se emocionan y participan de las actividades con fervor. Es una fiesta del vocablo la que instala Basilio Rodríguez en la Ciudad Heroica, como también se le conoce. Y este año hizo su aparición triunfal en el Hay Festival, donde tanto él como sus autores siguen cosechando éxitos y las palmas bien sonoras para seguir con sus labores y con un victorioso regreso el año entrante con una delegación mayor, que como la presente está dejando huella bajo el sello Editorial Sial Pigmalión en cabeza de Basilio Rodríguez Cañada y Raquel, su vital cómplice en las tareas de la empresa y maravillosa esposa. La Editorial Sial Pigmalión cuenta con un equipo de trabajadores de reconocida eficacia y esmero. Logra excelente difusión de las obras y mima a sus talentosos autores.

Mi mirada, la de esta Ulisas que se inquieta por tantos temas y realidades, se llena de brillos y de clamores por tan hermosa labor, que deja a tantos países y escritores en la cima de la literatura universal, gracias a la incansable labor de su pluma blanca, Basilio Rodríguez Cañada.