Crónicas de nuestro tiempo

Dialogo entre la verdad y la mentira

La verdad dialogaba con la mentira sobre el cambio que había experimentado la sociedad refiriéndose ambas a lo que cada una de ellas había supuesto para la evolución del mundo: 

VERDAD: Recuerdo cuando al principio de la vida, comencé a ser útil con la palabra para la creación de todas las cosas. ¡Tú no habías nacido!

MENTIRA: Nada más nacer con Caín, tu acaparabas el núcleo de todo y yo empecé a ser maldita. Por mí ejecutaron a muchas personas que hoy no lo habrían hecho. Por ti, los acuerdos se sellaban sin necesidad de mezclar la sangre, antes de lo que luego se llamaron acuerdos y contratos que hoy se hacen y donde las dos estamos presentes en la mente de quienes los firman.

VERDAD: Fui la reina de la creación. la Diosa de todas las religiones; el oráculo de los sacerdotes; el sentido de todos los acuerdos; el centro de todas las bodas; la virginidad de las inocentes; el horizonte de los jueces; la justicia de los desamparados; el juramento de los dioses; el origen de las transacciones; el orgullo de los hombres; el objetivo de todos; fui, el camino ¡Fui, Dios!

MENTIRA: Mientras tu eras todo eso, yo era la castigada; la odiada; la repudiada; el origen de las guerras; la sentencia de los verdugos; la autora de los litigios; la causa de las infidelidades; el demonio de las religiones; el origen de la maldad; el anticristo; la desgracia del mundo.

VERDAD: Lo cierto es qué con el paso de las edades, fuiste poco a poco tomando cada vez más protagonismo social.

MENTIRA: ¡Cierto! Los hombres se fueron dando cuenta que para avanzar más deprisa era necesario contar conmigo. Era necesario desplazarte a ti, para poder vender más. Para hacerse rico antes. Para conseguir propiedades. Para hundir a la gente sincera que te usaba como garantía. Era necesario llegar más lejos para cruzar fronteras sin remordimientos. Me hice fuerte en las guerras. Incluso la justicia comenzó a reconocerme como natural para ser utilizada sin castigo por el acusado.

Comencé a ser el motor de la evolución. Gracias a mí, las empresas empezaron a vender más y los políticos se hacían ricos. La competencia de mi ingenio te echó del estanque donde tu estabas para expandirme como el aceite por el mundo. Comencé a vender falsedades mientras la gente se contagiaba con ellas y creaba las suyas. Pronto renací de las cenizas para enturbiar tus valores hasta convertirlos en dudas. Dudas que se volvieron contra ti para negar tu verdad e imponer mi sutileza. Aprendí, que con una pequeña porción de mí cosecha, podía enturbiar la enorme transparencia de tu verdad y convencer a los más maliciosos. Experimenté, que quienes me utilizaban conseguían remontar sus resentimientos y acallar a los que hasta ahora caminaban por tu sendero. Por primera vez en la historia, me impuse en la sociedad convirtiéndome en moneda de cambio, uso y laurel, mientras tú te volvías obsoleta gracias a la soberbia, insolencia y abundancia de las nuevas generaciones que por caminos antagónicos convergían en mí.

VERDAD: Nunca pude imaginar que esto pudiese ocurrir en un mundo tan desarrollado, cuya civilización, ciencia y tecnología hallándose en el umbral de la perfección, la inmortalidad, prodigalidad y globalización, tu, "la mentira" qué deberías haber dejado de ser lucrativa precisamente por la fecundación de las artes, las letras y el dominio de la exquisitez, hayas germinado frondosamente en la mente y conciencia de un mundo cautivado por encontrar mi verdad y desterrar “tu mentira”.

MENTIRA: Cierto es lo que dices, pero la misma ciencia ha descubierto con el paso de los años, que yo, “la mentira” soy más íntegra que tú porque yo no soy relativa y tu sí. Los humanos que veían en ti la honestidad, ahora ven que estás limitada y eres frágil. Además, no interesas por exigua y mediocre en un mundo que dice ser progresista utilizándome a mí en tu nombre.

Reconocerás conmigo, que he pasado miles de años huyendo de ti cuando me descubría la gente, y quienes me utilizaban eran duramente perseguidos y ajusticiados.

Solo ha tenido que pasar el tiempo, para que mis aliados y defensores los políticos; que son los que dirigen el mundo utilizándome como herramienta de triunfo, hayan configurado una distopía profana y cándida, a medida de las nuevas generaciones y colectivos en la adversidad. Todo ello, ha servido para que democracias y dictaduras me hayan blanqueado, dando forma a una verdad imaginaría dominada sutilmente por un poder totalitario.

VERDAD: Evidentemente, la codicia y el ansia por gobernar han sido vitales para fomentar un nuevo mundo donde tú te has convertido en el núcleo socio-político y yo en la pesadilla hacía el destierro que tanto daño puedo hacer a quienes desde una posición mediática han conseguido que la exhortación popular fascine, persuada y conquiste a quienes perdidos en sus ambigüedades, miedos y complejos se hayan dejado adoctrinar por una exégesis estratégica en la que tú ahora cargada de triunfos y doblegados, te puedas pasear contaminando el mundo de las emociones conquistando delirios. Has sido siempre el honroso rechazo de conciencias y dignidades. Todo empezó a cambiar cuando los políticos más radicales, convencieron al pueblo de que "prohibir debía  prohibirse". Ahí es cuando empezaste a expandirte apoyada por aquellas primeras generaciones qué sobradas y aburridas, invocaron el recuerdo de todas aquellas mentiras del pasado para blanquear las del presente utilizando la acusación o a veces simplemente el reproche.    

MENTIRA: Así es querida amiga en la ruina. En la misma ruina, que yo me he mantenido durante miles de años, odiada y despreciada; cómplice de ladrones y nobles deslucidos. Ahora llega mi turno y mi orgullo aflora mientras tú te desvaneces. No solo me siento halagada, sino que me siento valiosa, vengada y productiva.

Gracias a mí, los negocios se amplían en todos los ámbitos del comercio y la industria. Gracias a mí, los políticos enseñan lo que antes estaba prohibido. Se deshace la historia; los Pueblos rivalizan mintiéndose unos a otros en busca del poder; los hijos mienten a sus padres; los padres a sus hijos y los matrimonios entre ellos, para apartarse de ti en busca de sus caprichos. Las familias se desmoronan porque tú “la verdad” te has vuelto una ofensa insoportable en una sociedad cargada de soberbia y engreimiento social.    

VERDAD: Me rindo a "la verdad" de  tu "mentira".