Sencillamente irresistibles

Cinco, cinco con amor y con ahínco

Cinco días, de reflexión, de retiro, de apagón. 

Cinco días sin un Usted ni parecido a Usted (que cada día dice una cosa y la contraria, ¡qué angustia!).

Cinco días desnudos de existencia. 

Cinco días de hambre y de sed porque el amado líder dio portazo, dio pinchazo, dio la terrible amenaza de su posible marcha. 

Porque (dicen las malas lenguas),que imitando a Maduro, aparco desde su carta dirigida a todos y para todos, el agotamiento, la perversión, la maldad la insidia, los bulos, el fango que le asfixiaba soplándole desde los infinitos flancos de su mandato, y se encerró en sus palacios de invierno para plantearse si le merecía la pena continuar como presidente en tanto los suyos se arrugaban en el dolor de la calumnia, de los infames jueces y de  los desgarramantas de los periodistas soltando despropósitos de su santa esposa, hija de Sabiniano, propietario, en tanto lo fue, de una maravillosa sauna gay repleta de gloriosos placeres, envueltos en la apariencia de gimnasio con bar.

Cinco días de deflexión, de retiro, de apagón, porque el cinco es un número mágico que en la numerología se relaciona con el despertar espiritual y los cambios que hacen crecer el deseo de vivir aventuras. Y la suya, Don Amor, lo ha sido, la “aventura de la travesía en el desierto”, aunque rebozada y rebasada de enamoramiento por su parienta ¡Nadie ama tanto como usted! y subvencionada por nuestros impuestos. (Aunque: Dime de qué presumes y te diré de qué careces, A lo mejor tanto, tanto, no es cuanto).

Cinco días reflejando los cinco elementos de la naturaleza que Don Narciso necesita   controlar para seguir siendo el “Puto amo”: tierra, agua, aire, fuego y éter. 

Cinco días ya que el número cinco también representa la parte lúdica más infantil y despreocupada. La del niño o niña que llevamos dentro, y que necesita expandirse, manifestarse y estar en armonía con la parte adulta. ¿Cuál en su caso será la infantil y cuál la adulta?, ¿son independientes? o sea, ¿Cuál es cual y quién es quien en la de la Amnistía, en la de sus carcajadas en el Congreso frente a Feijoo (a modo de tomadura de pelo), en la de las mentiras y despropósitos plasmados en las memorias y en las hemerotecas y almacenados en los autobuses fletados y repletos de bocatas de mortadela para arropar al Hierofante, es decir, a usted, el personaje que en Tarot –marcado por el número cinco-representa la figura del líder espiritual, el sabio, el que enseña y es maestro comprensivo, guapísimo, adorado, libre de culpa y si se lo propone, capaz de andar sobre las aguas?.

Usted es el sumo “Pontífice” el que sirve de intermediario entre el mundo divino y el terrenal, con la necesidad de buscar la verdad espiritual (es para morirse de risa) y luchar contra la maldad corrosiva de quienes se atreven a dudar de su perfección y de la de su esposa.

Cinco días, un número también muy Lorquiano 
“…Ya luchan la paloma y el leopardo (La paloma es Sánchez, el Leopardo la malvada prensa y los obscenos jueces)
a las cinco de la tarde.
A las cinco de la tarde.
A las cinco en Punto de la tarde.”

Pero también eran cinco los lobitos que tenía la loba detrás de la escoba.

Y relacionada con esa zona trasera (todas las rosas tienen espinas), hay una rima espantosa con el Cinco. De lo más ordinaria, de la que de ninguna manera debería ser el sujeto un ser tan divino, tan virtuoso y tan carismático como Usted, dispuesto a liderar la bondad universal con el mayor Ahínco.